La tormenta que ya pasó. Reflexiones tras gamerLand

Foto: MeriStation

La marabunta de estos últimos días en la feria gamerLand ha vuelto a su redil. Ya no resuenan en el recinto del BEC de Bilbao los gatillos de los pad de consola, ni los pitidos y músicas de las máquinas arcade...El silencio ha vuelto a reinar en los pabellones de ese gran coloso de las convenciones.

GamerLand quiere convivir con otra de las grandes ferias del país, Gamefest, cuya trayectoria inicial ya ha sido todo un hito en la historia de los videojuegos en España. Su proeza está en haber conseguido la nada despreciable cifra de 40.000 personas que, durante 3 días, se reunieron en los famosos pabellones de la feria de Madrid, Ifema.

El BEC (Bilbao Exhibition Centre) ha querido emular a ese coloso de las convenciones y, con un presupuesto más modesto, menos tiempo de organización y una merma en la difusión, ha congregado a una loable cifra de 10.000 almas bajo el mismo techo.

Pero sin entrar en odiosas comparaciones, si que se debe pensar en las consecuencias de cada una de las ferias.

Vídeo extraído de Ps3p.es (blogocio.net)

Una, Gamefest, es desde ya un referente europeo a unos pocos días de su finalización, y la otra, se ha erigido como el gran baluarte de las ferias de conferencias. Ambas apuestas pueden convivir en perfecto estado de armonía, sin solaparse, y si complementándose. Lo más importante es que se está empezando a gestar el germen de una revolución, el basamento que ha de construir la gran industria del juego en España.

El hecho de contar desde ya con dos excelentes ferias da bastantes pistas de lo que sucederá en los próximos años. Una oleada de desarrolladoras y compañías de distribución podrán salir de su letargo para constituir un sólido núcleo de aportaciones tecnológicas y digitales , pudiendo dejar ver el gran potencial que existe dentro de nuestras fronteras.

Es hora de conectar al mundo con las grandes historias de aventureros, con los bosques plagados de duendes y hadas, el gran estruendo de los motores de cientos de caballos de potencia, las enormes cataratas de un parque acuático o las grandes naves interestelares que surcan la galaxia. La imaginación en forma de bits tiene un gran futuro por delante, gracias a la ilusión de personas que creen que los videojuegos son el octavo arte, la gran maravilla del siglo XXI. Apostemos por la cultura.

Hoy culmina gamerLand, la feria de los jugones

Foto: MeriStation

Las buenas cifras de asistencia hacen prever que el año que viene habrá una próxima edición

GamerLand, la nueva feria de videojuegos acogida por Bilbao desde el pasado viernes hasta este lunes, día 1, ha concluido en el pabellón 3 del Bilbao Exhibition Center. Numerosos han sido los expositores y también los asistentes que han poblado todo su perímetro, unos 10.000 metros cuadrados de auténticos sueños digitales.

Las grandes compañías que han salido triunfantes en esta 2ª edición -no olvidemos que la primera llevaba el nombre de Fived y se originó en Córdoba- han sido, sin lugar a dudas, las que dirigen hoy por hoy la batuta, y no son otras que Nintendo, Sony y Microsoft. Todas ellas han presentado a sus máximas cabezas ganadoras, Killzone 3 y Gran Turismo 5, por parte de Sony; la gran abanderada de los juegos sin mandos, Microsoft con su nueva interfaz Kinect y como no, Nintendo y sus múltiples juegos para sus afamadas Wii y Nintendo Ds.

En el primer caso, la compañía nipona presentó el afamado y aún inconcluso Gran Turismo 5, cuyo desarrollo sigue aún, aunque en un estado bastante avanzado. En gamerLand pudo probarse a modo de demostración en 5 cabinas muy bien equipadas con pantalla, volante y sillón y así poder disfrutar del máximo confort de una de los mayores atractivos de la feria. El juego de la desarrolladora Polyphony posee muchas bondades a nivel gráfico y jugable, y destaca sobre todo por el mimo que se le está imprimiendo en todos los acabados técnicos.

Gran Turismo 5

Por otro lado, se encuentra la esperada tercera parte de uno de los shooters más espectaculares de los últimos años en esta generación de consolas. Se trata de Killzone 3, un juego en primera persona que trata de encumbrarse dentro de su género y alcanzar cotas inimaginables en cuanto a jugabilidad. Las mejoras gráficas de este título ya eran casi insuperables, pero parece que va camino de alcanzar la excelencia técnica en todos sus apartados. La culpa la tiene en parte su excelente ambientación, que logra crear una gran inmersión del jugador en la historia que se presenta.

Video de Killzone 3 (ps3p.es)

El gran abanderado de Microsoft se llama Kinect, y se trata de un periférico que hace las veces de captador de movimiento, involucrando a nuestro cuerpo por completo con los videojuegos que lo soportan. El increíble invento de la marca del afamado Windows se ha propuesto hacernos esculpir nuestra figura hasta límites insospechados. Como ya han mostrado en ferias como Gamefest, Microsoft ha apostado por colocar una enorme plataforma con los colores que les definen, verde y blanco, construyendo todo un coloso de la diversión en mitad del recinto. La iluminación, los colores y el ambiente que consigue de esta forma son inmejorables, e invitan a probar los videojuegos familiares que han diseñado para desembarcar en los hogares este próximo mes de noviembre. Entre ellos Joy Ride, Dance Central o Kinect Adventures, entre muchos otros.

Además de estas novedades, también ha habido cabida para otros contenidos, como el no menos deseable Red Dead Redemption, de los irreverentes Rockstar. Con su contenido deacargable (DLC), que nos lleva al salvaje oeste, esta vez viéndonos las caras con temibles zombies.

Si bien la feria ha estado dedicada casi en exclusiva a los títulos más actuales, también se ha hecho especial hincapié en los clásicos de las recreativas de toda la vida. Entre los juegos más destacados se han podido ver el sempiterno y adictivo Tetris, el entrañable Pac-man o el aguerrido y efectivo Street Fighter II, con su tanda de personajes archiconocidos del mundo del videojuego.

Todo llega a su fin

Por supuesto que también hay que agradecer que la organización del evento haya tenido la consideración de incluir grandes conferencias y mesas redondas donde se ha podido comprobar que los videojuegos están ya muy integrados en nuestra cultura, aportando los mismos niveles de imaginación y calidad que cualquier otra obra artística. Ya solo nos queda esperar que para el año que viene se incluyan más stands y que el sector del ocio digital español pueda aflorar de forma imparable, añadiendo más compañías y desarrolladoras al montante actual.